[Vaya que se frustró. Sakaki tuvo que llamar por teléfono en el peor momento.
Ladea el rostro para darle más espacio a tus labios por su piel, aunque eso no quita que suba una mano por tu cuello para darle un ligero tirón a tu trenza.] ¿Quién se estaba frotando como un perro contra mi rodilla al final? [No que sea una queja, pero la gracia es molestarte.]