[Es cierto que lo recostaste en el sillón para que no hiciera esfuerzos innecesarios, pero realmente le es difícil quedarse quieto por mucho rato. Así que aprovechando tu cercanía, se inclina un poco hacia adelante...
Hasta poder alcanzar con los labios a besar una de esas marcas que anteriormente acariciaron sus dedos.]