[Y si no te lo ganabas por abrir la boca, posiblemente vayas a ganártelo bastante pronto. Porque sí, Sakaki aprovecha tener un poco más en control la situación para hablarle con una voz dura, indicarle que es momento de que deje de dudar.
"Ya no hace falta que escuche más. Mátalo. Duda en hacerlo y te amarraré a ti también."
Y así termina con. la pistola en la mano, el arma cargada que usaron para dispararte antes. Sakaki le observa atento, esperando su movimiento mientras él apenas es capaz de girar en tu dirección con la mirada perdida y cansada... apretando el arma mecánicamente a tu cabeza.]