[Gruñe bajito al sentir la pared, bajando su mano por tu espalda para poder sentirte más cerca aún. Siente que a pesar de lo pegados que están, te necesita mucho más cerca, y tu urgencia (y la propia) lo desarman.
Así que por supuesto que te responde con la misma intensidad y brutalidad ese beso, buscando tu lengua con la suya.]