[Se hace el desentendido metiéndose las manos a los bolsillos al caminar pero te devuelve la mirada divertido, con el cigarro en los labios.
Es curioso como hace unas horas, cuando te vio en el bar su primera reacción fue querer golpearte o salir huyendo, pero ahora... es como si estuviera manteniendo una charla cualquiera contigo. Como si nunca te hubieras ido en primer lugar.] ¿Yo? Simplemente me iba a mi casa a descansar, pero parece que tú estás lo suficientemente ebrio para seguirme y caminar en dirección contraria a tu hotel.