[Suelta algunos quejidos cuando comienzas a morderlo nuevamente. Si vas a marcarlo, espera que sea con fuerza suficiente para hacer que esas marcas las pueda llevar por días sobre la piel.
Está resistiéndose a la idea de tumbarse sobre la mesa únicamente porque quiere instalar mejor una de sus piernas entre las tuyas, empezando a acariciarte un poco con la rodilla. Y sus manos quieren tocarte, clavarte las uñas en ese torso trabajado y recordar cada una de tus cicatrices bajo su tacto.] K-Kazuhiko- márcame... más