[Jadea de nuevo ante el sonido de su nombre en tus labios, pero te besa de vuelta casi con brutalidad, sintiendo su propia desesperación. No quería que fuera así exactamente si llegaban a reencontrarse de esta forma, pero simplemente no puede controlar sus ansias de ti, y el placer que le haces sentir sólo lo abruma más.
Intenta moverse para llegar lo más profundo posible, y no hacerte daño real en el proceso, pero la fuerza con la que se mueve contra ti probsblemente haga que te golpees un poco contra esa pared al ritmo de sus embestidas.]