[Sigh. La pregunta le hace fruncir el ceño por un momento, por supuesto que empezarías por ahí.] Supongo que de un amigo. Comencé a sentirme mal, no consideré la lluvia y salí corriendo en un impulso. [Es parte de la verdad al menos. No va a revelarte todo de golpe porque tampoco lo has hecho.
Pausa para formular otra pregunta.] ¿A quién buscas en la ciudad?