[Gracias, público conocedor. Será porque le gusta mucho hacerte sonreír, además de su idiotez natural.
Y bueno, sí, te gustará a ti entonces verlo ahí, tendido sobre el sofá debajo de ti, con los ojos cerrados un momento y moviéndose apenas contra tu mano, completamente entregado a ti y a lo que haces con él, como dijo antes. Va a volver a jadear despacio mientras lo frotas, disfrutando la sensación.]