[Ya debes hacerte a una idea de que es mejor expresándote con actos que con palabras. Pero sí, que sigas viviendo bajo ese techo o que hubiese estado cuatro meses antes pintando cuadros sobre ti, deben decir bastante por si solos.]
Eso parece. [Solamente ahí es cuando se vuelve a acomodar encima tuyo, apoyando las manos y su rostro en tu pecho para intentar hacer otro poco de contacto visual.] Aunque te guste hacer el ridículo constantemente, no dejas de ser alguien interesante.