[Lo puedes considerar como un logro, de hecho. También en la privacidad de la casa al menos ya no le huye tanto a tus muestras de afecto.
Puede conversarte por un trecho de minutos de las cosas que aprecia, las técnicas y las composiciones. Cosas de las que se ha ido refrescando la memoria también durante todo el tiempo que se dedicó exhaustivamente a pintar. Es hasta un poco nostálgico recordar que los cuadros fueron su escape durante esos meses que no supo nada de ti también.] Me tendrás que pagar al menos una cerveza sin que tenga que ver con tu tonto juego. [Por las cosas que te comentó.]