[No le es ninguna novedad desnudarse en frente tuyo, pero es tal vez tu encantadora expresión y el contexto de la situación, lo que hace de esa oportunidad algo diferente, más íntimo.
Aprovecha la cercanía para besar una de tus enrojecidas mejillas en un gesto cariñoso. Un distractor de esa mano suya que vuelve a acariciarte más abajo.] Um... quiero todo de ti.